Sentada en las puertas de un tanatorio, mirando el cementerio, escuchando los pájaros, alguna persona caminado y algún que otro coche. Se respira paz y tranquilidad.
En un rato vendrán los llantos y sollozos que todos retenemos, es como una cadena, en un momento uno llora y otros le seguimos, pero lloramos juntos, por una misma causa y por una misma persona.
Recordamos a “M”, muchos o pocos momentos compartidos, pero bonitos recuerdos vividos. Te hace sentir triste, pero tratas de pensar que al menos terminó su agonía, llego hasta el día que deseaba, rodeada de su familia.
Es muy duro perder a una persona, que es madre, hija, tía, hermana, cuñada, amiga… pero ante todo, una buena persona, la cual será recordada por muchos años.
Cuando pienso en ella, solo viene a mi cabeza su sonrisa y así permanecerá en mi cabeza y en mi corazón.
“M”, espero que ahora con tu marido, termines de ser feliz, tu agonía terminó, te portaste como una campeona, ahora descansa, se feliz y disfruta ahí donde estés, poco a poco ya iremos reuniéndonos contigo. Un beso
I jo també penso en tu, en aquella nena d'ulls entremaliats i somriure brillant que em feia riure fins i tot quan la renyava.
ResponderEliminarPassen els anys, i segueixes regalant la teva espontània simpatia malgrat que la vida ja t'ha mostrat la seva cara amarga...
M'agradaria dir-te quan ho passes malament, com quan eres petita, alló de "sana, sana culito de rana" però a la teva edat ja no és f`´acil creure en remeis miraculosos. Tot i així, de vegades encara ens refà d'un mal dia o d'una mala temporada una abraçada sincera com la que aprofito per enviar-te mitjançant aquest blog que és una finestra al cor.
Petons i una abraçada de la teva "cangur",
Mayte